¿QUIEN SOY?
A veces no es tan fácil responder a esa pregunta. Por diferentes circunstancias a veces somos unos grandes desconocidos para nosotr@s mism@s.
Te invito a reflexionar sobre estas cuestiones
¿Estoy presente en mi vida o ausente?, ¿estoy en modo piloto automático?
Plantéate ¿Qué puedo hacer para estar un poco más presente en mi vida?
Mantener una actitud de observación constante de mí mism@ es crucial para poder conocerme. Observarme día a día, poco a poco con una cosa de cada vez.
Hay algunas cosas que pueden ayudarme a ver si efectivamente me conviene conocerme un poco más, y ciertas prácticas que pueden ayudarte a conocerte un poco más en cada una de ellas.
· Tener ideas muy rígidas sobre mí
¿Usas palabras absolutas para definirte? Por ejemplo, si para definirte solo te salen etiquetas de ti mism@ y no eres capaz de matizar es un indicador de que falta “información de contacto”.
Ej. Soy vaga
Muchas veces dependerá no de un conocimiento real de ti sino de etiquetas que te has puesto (o que te han puesto y has “comprado”), prohibiciones, creencias, expectativas sobre ti, generalizaciones,…
Consejo: Plantéate esa “etiqueta” ¿se cumple en todos los casos?, ¿realmente lo siento como parte de mi forma de ser?, ¿me cuadra conmigo?
Ten cuidado con generalizar.
· No tener espacio para el placer y el disfrute en tu día a día
Darte actividades en tu vida que te gusten y que te llenen. Incluso ni siquiera saber que te gusta realmente, permitirte probar es importante para poder hallar lo que en este momento te cuadre.
Por ejemplo ¿qué actividades haces solo por hacerlas (no por trabajo, peticiones,…)? Ej. Voy a pasear al monte porque me despeja. Estas actividades ¿forman parte de tu vida?
Consejo: Cada día vete probando algo que sepas o creas que puede conectarte con el placer. No tiene por qué ser algo grande ej. Visitar una ciudad, las más importantes son las que puedas hacer en tu día a día como tomarme un café con calma, jugar un rato, leerme un libro, pintar, o hacerme un masaje (incluimos automasajes).
· No sé ni que quiero
“Vivo en piloto automático y me dejo llevar”, aquí iría la típica frase de “lo que tú quieras”, el problema es que lo digas porque no tengas ni idea de lo que quieres tú.
Acabaré haciendo lo que se espera de mí, lo que me pidan, sin realmente escuchar qué me apetece a mí, o incluso qué necesito.
Consejo: Pregúntate ¿qué me gusta?, ¿qué me apetece?, ¿qué no me apetece? … prueba y vete observando qué efecto te deja, si es algo agradable repítelo.
Lo que tiene sentido para mí puede ser una cosa ahora y otra dentro de un tiempo, por eso es importante ir actualizando mi conocimiento de mí para no funcionar de forma automática.
No tengo opinión propia o no la doy
Tener opinión propia es importante pero a veces parece que no la tenemos.
Aprovecha los momentos del día en los que puedas preguntarte qué opinas sobre un tema y expresarlo. ¿Qué pienso de esto?, no tiene por qué cuadrar con lo que “se supone” que tengas que pensar, observa que le gusta a tu mente ¿Qué temas me interesan?, ¿sobre qué temas me gusta investigar?
Consejo: generar situaciones en las que pruebe qué me va bien, qué no, … generar opiniones y ponerlas en palabras.
· Sentirme desconectado de mi cuerpo. No conocerlo. Sentirlo como un extraño.
Permítete usar tus cinco sentidos para conectar con tu cuerpo aquí y ahora. Averigua qué le va bien y qué no. Observa tu cuerpo, tus reacciones, lo que te gusta y lo que no…
Consejo: Plantéate ¿Qué colores, formas, sabores, texturas,…me gustan más?, ¿qué alimentos me hacen bien y cuáles no?¿qué movimientos le van mejor a mi cuerpo?¿tengo síntomas físicos?¿desde cuándo?¿por qué están presentes? Descubre tus ritmos ej. Gesticulo mucho, me gusta el silencio o ruido, frio o calor, oscuro o con luz,…
· MIS RELACIONES (incluyendo la tuya contigo)
Revisa tu vida y tu momento actual y plantéate. A veces a través de nuestras relaciones y formas de relacionarnos conseguimos información relevante sobre nosotr@s.
Consejo: Plantéate ¿Qué dicen de mí estas relaciones?, ¿cómo han cambiado mi forma de relacionarme a lo largo del tiempo? ¿Qué espero de una relación? ¿Qué pongo en ella? ¿Hasta qué punto soy exigente/rígida o excesivamente adaptable? ¿Qué se siente bien y que no? ¿Qué me agrada?
¿Qué cambios busco? ¿Qué exijo y que doy? ¿Qué es realmente importante para mí que cambie en cómo me relaciono? ¿En qué contextos o situaciones me cuestan más estos cambios? ¿en qué contextos lo necesito menos? ¿Cuáles son los recursos de estas situaciones?
· No tengo claro que me afecta o cómo
Así parece que todo lo que me afecta es al azar, depende de los otros, del destino,…
Consejo:
Para poder saber qué me afecta, cómo, y ubicarme en mi mapa mental y emocional propongo:
- Escribe un diario para poder observar tus pensamientos, ideas, imágenes,… más presentes. Te ayudará a observar qué es importante para ti, cuáles son tus valores,… Solo ponerlo por escrito ya ayuda a darle forma y que seas consciente de lo que piensas.
- Observar lo que pasa en mi mente en este momento, sin engancharme a ningún pensamiento, los voy dejando pasar como si hiciera zapping.
- Registro de mis emociones, ej. ¿Cómo es esa rabia?, ¿cómo toma forma? ¿Qué hago generalmente cuando siento esa emoción?
En resumen, para poder conocerme tengo que conocer mi mente, mis emociones y mi cuerpo, y mi forma de relacionarme.
Estando más presente en mi vida, dándome oportunidades para probar y observar, y generando situaciones que me permitan entrar en un contacto placentero conmigo.
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